¿Preparados para usar colores atrevidos?

Como lo prometido es deuda, hoy os contaremos más sobre colores, pero esta vez, los trucos sobre tonos fuertes!!!

Lo primero es avisaros una vez más que este tipo de tonos son mucho más personales que los tonos neutros, por lo que si lo que queréis es presentar vuestra vivienda para que guste al mayor número de personas posibles para alquilarlo o venderlo, deberíais optar por tonos suaves y neutros, menos arriesgados.

Una vez hecha esta observación vamos con ello…

Al igual que hicimos con los colores claros, vamos a utilizar las distintas gamas de colores según la orientación de la habitación en cuestión y seguiremos el mismo orden que en el artículo anterior.

Así pues una estancia dirigida al norte (N), donde los rayos de sol no entran directamente, podemos utilizar, por ejemplo, el gris intenso en una de las paredes de la habitación dejando las otras tres de color blanco, lo cual daría un toque dinámico a la estancia y además podríamos servirnos de esa diferencia de color para crear distintos ambientes, es decir, si se tratase de un salón comedor la pared gris podría indicar la zona de comedor mientras que la zona de estar iría acompañada por el color blanco. O bien dos grises y dos blancas, las posibilidades van en función de las características de la estancias en cuestión por lo que habría que tener en cuenta el número, la disposición y el tamaño de las ventanas que haya en la misma.

Aplicar el color de esta nueva forma requiere observar distintos factores a la vez, que van a servirnos de guía para potenciar rincones, separar ambientes, dar luminosidad o atenuarla según el caso…

En las orientaciones suroeste (SO) y noreste (NE), si nos gustan las tonalidades ocres podemos aplicarlas sin miedo, incluso los amarillos tipo portugués o marrones de los distintos tipos. Al igual que hemos explicado para la orientación norte, podemos jugar con pintar una o dos de las paredes de la estancia de un tono fuerte y elegir un tono claro de la misma gama para el resto.

Antes de seguir, tened en cuenta el tipo y tono de suelo que tenga la habitación que puede ser determinante a la hora de elegir el tono de las paredes para que no resten luminosidad o bien lo contrario.

Y el techo por regla general y salvo excepciones, aconsejamos el color blanco.

En aquellas estancias dirigidas al este (E) y al sureste (SE) podemos atrevernos con los tonos verdes, especialmente indicados si se trata de una habitación destinada a los niños, ya que dicho color potencia su crecimiento, y además podemos aprovechar las nuevas gamas de verde que hay actualmente y que dan un resultado realmente agradable. También son adecuados los azules si lo que nos va son temas más marinos sin irnos a tonos demasiados oscuros, más bien azulones… y luminosos…

Volvemos a meter otro inciso, es el tema de los zócalos!!! Que compaginados con los colores oscuros, quedan realmente bien. Por ejemplo, si pintamos una habitación de un tono podemos realizar un zócalo de rayas verticales blancas y del mismo tono utilizado en la parte superior, de forma a descargar un poco la habitación de esa tonalidad oscura y dándole a la vez dinamismo e incluso un toque divertido si elegimos un zócalo de dibujos adaptado a la habitación de niños.

Para acabar, nos meteremos con los tonos realmente atrevidos, esto es naranjas y rojos, para las estancias orientadas al sur (S). Es una opción arriesgada pero que puede quedar muy bien aplicada con criterio y observando los distintos factores que ya hemos ido comentando anteriormente. Por ello, este tipo de tono fuerte se suele aplicar en una sola de las paredes para marcar el contraste con el resto y potenciar, animar o vivificar la zona en la que se aplique. Hay que resaltar que estos tonos no son aconsejables para dormitorios, zonas de estancia – relax o zonas de estudio ya que su efecto es muy fuerte y dinámico.

Ya para terminar deciros que sois vosotros los que debéis elegir el color de cada estancia según los efectos que queráis conseguir para cada zona y que si utilizáis los distintos trucos que os hemos contado, comprobaréis que es posible utilizar los colores más atrevidos y arriesgados que no sólo no os habíais ni imaginado utilizar, sino que además le ha dado a vuestro hogar un nuevo aire fresco y dinámico sin que falte la armonía y el equilibrio…

Hasta la próxima.

Por Begoña Jiménez Barandalla. Arquitecta y Especialista en Feng Shui.